Categorías
Guerra Imperio Líderes

MAGGIE Y LA GUERRA DE LAS MALVINAS

Este episodio de la Guerra Fría no levantó mucho interés entre los historiadores, en parte porque no se trató de un enfrentamiento entre las dos superpotencias hegemónicas y en parte por la poca duración del conflicto. Sin embargo considero que tiene un interés secundario pero de largo alcance, porque refleja la fortaleza de un régimen democrático cuando ve amenazados sus intereses por una dictadura militarista.

Los argentinos llevaban tiempo reclamando las islas Folkland porque consideraban que entraba dentro de su área de influencia. Por otro lado, aprovecharon el asunto para desviar la atención sobre la represión que se estaba llevando a cabo contra los opositores de la Junta Militar.

La Primera ministra se encontraba entre la espada y la pared. Por un lado había que defender el Imperio y lo que éste representaba en cuanto a valores democráticos. Por otro lado, había muchos intereses comerciales que presionaban para resolver este asunto por medios diplomáticos. Ella lo tenía muy claro, las islas están habitadas por ciudadanos británicos y éstos tienen el derecho a elegir libremente su futuro. Cualquier acto que imponga un cambio de régimen manu militari, no será aceptable para un Gobierno democrático y se enfrentará a graves consecuencias que incluyen el empleo proporcional de la fuerza -Gran Bretaña, al parecer, no utilizó su arsenal nuclear en ningún momento-.

Se podría buscar un paralelismo entre el desafío de la Junta militar argentina y el que protagonizó Hitler cuatro décadas antes. Los argentinos prefirieron los hechos consumados, calculando erróneamente que Thatcher no provocaría un conflicto armado a tantos miles de kilómetros de las costas británicas, se equivocaban. Thatcher logro una resolución de Naciones Unidas para legitimar el envío de una fuerza expedicionaria, con la que recuperase la situación anterior a la invasión argentina. 

Para legitimar su línea de acción, Maggie tuvo que soportar las presiones de Washington para buscar una solución diplomática. Posteriormente el Secretario General de la ONU también aprovechó la situación para desplegar su propia iniciativa de Paz. Ella lideró un Gabinete de Guerra y dispuso a la opinión pública para afrontar la pérdida de vidas humanas que se disponía a provocar con sus decisiones. «El Gobierno quiere un acuerdo pacífico,pero rechazamos totalmente una traición pacífica», llegó a proclamar. En otro momento de la tensa espera que se produjo hasta que la fuerza expedicionaria llegó al Teatro de operaciones, vio clara la necesidad de lanzar un ultimatum a los militares argentinos, sabía que éstos lo rechazarían.

Poco después se produjo el desembarco el 1 de mayo de 1982, sin sufrir ni una sola baja, posteriormente se produjo un intenso hostigamiento por parte de la aviación argentina pero el resultado es de sobras conocido. El 20 de junio el Reino Unido declaró el final del conflicto. Murieron 650 combatientes argentinos y 255 británicos, además de tres civiles.

Entre las consecuencias se cuenta el debilitamiento y posterior caída del régimen militar argentino, además de la reelección de Margaret Thatcher como primera ministra en las elecciones de 1983, impulsando su carrera política dentro del partido y permitiéndole llevar a cabo las reformas económicas posteriores. En otro orden de cosas, mejoró la complicada posición de Thatcher entre los mandatarios comunitarios -mantuvo una conversación con el presidente Mitterrand en la que le dijo que los franceses tenían un contrato para suministrar Misiles Exocets a Perú, que él ya había suspendido; pero temían que los misiles pasaran a Argentina, cosa que pudo evitar-. Reforzó los intensos lazos con la administración del Presidente Reagan y revitalizó el ejército británico convirtiéndolo en uno de los de mayor capacidad operativa.

Volvió a dejar claro que una democracia, cuando se siente atacada, pone en juego lo mejor de sí misma y supera a cualquier otro régimen político por autoritario que se muestre. Como decía Churchill «La democracia es el peor sistema de gobierno si excluimos todos los demás».

@salenko1960 agosto 2021

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *