En 1942 Fallece el músico Glen Miller en un accidente de aviación, el estilo de música que había desarrollado (y que conocemos como Big Bands) tuvo su continuidad durante los primeros años de la Guerra Fría, por lo que este artículo sobre las grandes bandas norteamericanas está dedicado a su figura y, en especial, a su inolvidable In The Mood que llegó a lo más alto en 1940.
Las Swing Bands reforzaban su papel como orquestas de baile reduciendo las improvisaciones (propio del jazz), para que los blancos no perdieran el paso. El primer recuerdo para estas músicas que bailaron nuestros padres en los bailes y saraos de los 50 (aunque a España estas músicas tardaron algunos años en cuajar), es el de una fiesta elegante donde los chicos vestían con traje, y las chicas llevaban faldas con vuelo (estilo pin up). De vez en cuando ellos las invitaban a salir a la pista de baile y moverse al ritmo de estos compases, mientras charlaban y se conocían. Muchas relaciones nacieron en este contexto (si hacemos caso a los estándares de las películas de Hollywood).
La primera canción se titula Swinging on a Star del estadounidense Jimmy Van Heusen, que ganó un oscar a la mejor canción original en la película Going My Way, protagonizada por Bing Crosby.
La segunda es la célebre Sing, Sing, Sing del artista más aclamado de la época, Benny Goddman, a quien Hollywood dedicó la película autobiográfica La historia de Benny Goodman (1955). A Goodman le llegaron a apodar “el Rey del Swing”, y su carrera fue larga y exitosa.
Para cerrar este artículo, mencionaré a Nick Perito y su obra The Continental. Una obra algo posterior y que introduce los ritmos latinos en este apartado tan típico de la cultura norteamericana.
@Salenko1960